Consejos para cuidar un gato bebé

Algunos consejos para tu gato bebé:

1. Crea un entorno confortable y seguro para el pequeño gatito. Es muy importante que tenga un sitio donde poder dormir y sentirse relajado, ya sea con una cama, una cueva o un igloo suaves, acolchados y calientes. 
2. Enséñale su arenero. Es importante que sepa dónde tiene que hacer sus necesidades. Le puedes enseñar dejando algunos excrementos suyos dentro, así lo asociará rápidamente.
3. Aprende a jugar. Desde bien pequeños los gatos necesitan actividad diaria y la atención de su dueño para conseguir una salud mental y física activa. Puedes contar con varios tipos de juguetes, ya sean tipo ratones, pelotitas, peluches, o cañas de pescar, que activarán su instinto de cazador, o también puedes contar con juguetes de inteligencia que les ayudará a estimular su mente y evitar así comportamientos destructivos.
4. Apórtale distracciones y estímulos. Los snacks o piruletas que contienen Catnip o Matatabi son ideales para los gatos. Contienen un olor ligero y dulce que enamorará tu pequeño amigo, y le ayudará a aliviar estrés, la ansiedad e incluso mejorar vuestro vinculo efectivo.
5. Utiliza transportines o mochilas para movilizar tu gatito, ya sea al veterinario o para cambiar de espacio fuera de casa. Aunque a los gatos no les gusta moverse mucho una vez aposentados en un espacio fijo, si tienes que salir de casa, hazlo mediante un trasportín o una mochilita adecuada para ello.
6. Mantén una higiene adecuada. Aunque los gatos son muy limpios, puedes cepillarle el pelo con cuidado desde el principio, así se acostumbrará. Despendiendo del tipo de pelo que tenga, lo podrás hacer con mayor o menor frecuencia, pero siempre con los cepillos adecuados y con delicadeza. También puedes asear tu mascota con un champú específico de vez en cuando para mantenerlo limpio.
7. Cuenta con un rascador para sus uñas. En general los gatos se liman las uñas solos con un rascador, pero no solo sirven para eso. Los rascadores sirven también para trepar, hacer ejercicio, marcar el territorio con su zona de juego y liberar estrés. ¡Si cuentas con un rascador salvarás los muebles y el sofá de tu casa! Es importante que los rascadores tengan estabilidad en su base, que el tamaño vaya acorde con el tipo de gato que tengas o la cantidad.